Este domingo dos de los mejores tenistas del mundo se
han visto las caras en la final de Montecarlo; un Djokovic que no tenía
intención de regalar nada y un Rafa Nadal que tras su lesión que le tuvo varios
meses alejados de la pista ha vuelto de la mejor manera posible.
En los últimos años ambos tenistas se han enfrentado
en numerosas ocasiones, en varias finales, esta fue la decimoquinta vez que se
enfrentaron en tierra batida, territorio en el que el español casi siempre ha
logrado imponerse, en total se han visto las caras treinta y cuatro veces, con
un balance favorable a Rafa Nadal (19-15), pero esta vez no pudo ser y es que
es la tercera vez que el serbio jugaba esta final (las tres contra Rafa), pero
nunca había logrado alzarse con el título hasta hoy, a la tercera va la vencida.
Djokovic se impuso a Nadal por 6-2 y 7-6 en una hora y cincuenta y dos minutos.
Convirtiéndose de esta manera en el único tenista junto a Gaudio que logra ganar al mallorquín mas de dos veces en tierra batida.
Hoy no fue un día para enmarcar para Rafa Nadal; el
partido comenzó casi una hora después a causa de la lluvia, en el primer set no
se vio su mejor versión, tuvo muchos errores que le permitieron al rival
hacerse con el primer set, el partido comenzó con un 3-0 favorable al serbio, esto
sumado al gran nivel del tenista de Belgrado, su espectacular saque y a los
escasos fallos que tuvo a lo largo del partido, llevó a que fuera este el que alzase
el título de Montecarlo.
A pesar de los intentos de Rafa en ningún momento
logró imponerse, reaccionó casi al finalizar el primer set con uno de sus
golpes a los que nos tiene acostumbrados, pero no fue suficiente para ganar el
primer set, pues Djokovic tenía una gran ventaja.

Fue en la muerte súbita en la que el número uno del
mundo volvió a ser superior tumbando a Rafa con un 7-1 ganado el partido. De
esta manera rompió la racha de Nadal que venció en las ocho ediciones
anteriores del torneo.
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