Por si con el ajetreado fin de semana en Australia se les había hecho
poco a los aficionados de la Fórmula 1, en menos de siete días la competición
coge las maletas y se dirige a Malasia. Rumbo al circuito de Sepang, dónde cualquier cosa puede suceder como ya se vio
la temporada pasada, con la inesperada victoria de Fernando Alonso, saliendo
desde la octava posición.
Siempre es
una incógnita este Gran Premio por las duras condiciones climáticas en las que
se encuentra, propiciadas por una gran humedad a la que se unen altas
temperaturas. Es por ello, que cualquier
parecido con lo vivido en Melbourne será fruto de la casualidad. Una primera carrera
en la que se pudo ver el gran inicio del Lotus con mucho ritmo en carrera y
mínima degradación en sus gomas. De no haber sido por esto último, la victoria
de Kimi hubiera sido prácticamente imposible. Por lo que habrá que ver si ese
rendimiento fue producto de las particularidades del circuito semiurbano de
Australia o los neumáticos seguirán actuando de la misma forma, en una pista
dónde se esperan cerca de 35ªC.
Esta será la
gran incertidumbre de todos los equipos e incluso mayor en Red Bull, ya que se
pudo ver como su monoplaza “devora” los compuestos Pirelli y merma demasiado el
potencial del RB9. Un grave problema, que de continuar puede convertirse en un
factor determinante en el campeonato, puesto que Ferrari parece haberse
adaptado bien esta temporada a los nuevos materiales y le han sacado todo su
jugo a la máquina. Además, la escudería italiana tiene un monoplaza con un buen
comportamiento en lluvia, lo cual será
importante en este Gran Premio, debido a que siempre hay altas probabilidades
de chubascos y una carrera en mojado sería más que factible. De hecho, Alonso se
alzó con el triunfo contra todo pronóstico la campaña pasada gracias a esto.
Por otro
lado, dejando a un lado los neumáticos y la lluvia, lo lógico sería no ver
grandes sorpresas con respecto a la semana pasada ante el poco tiempo entre una
carrera y otra, contando con la lejanía de las fábricas. Por lo que cualquier
evolución de grandes proporciones estaría disponible para China o Baréin. Así
lo normal, sería ver de nuevo a Lotus, Ferrari y Red Bull peleando por la
victoria, visto el poco potencial de los Mclaren.
La escudería
británica ha empezado con muy mal pie el Mundial y mucho deben mejorar después
del fracaso de sus dos pilotos, Button y Pérez; en 9ª y 11ª posición
respectivamente. De resto, se pudo ver a un Mercedes en clara progresión y que
con Hamilton nunca es descartable; y
añadir la grata sorpresa de los Force India, que dieron guerra en Australia y
tienen un gran ritmo en pista.
Se verá
indudablemente un nuevo fin de semana apasionante dónde la emoción estará
asegurada y ármense de paciencia, porque como llueva habrá que estar alerta
como ya ocurriera en la primera prueba de la temporada.
Datos Históricos:
El Gran Premio de Malasia se lleva celebrando desde 1999.
Esta será su 15ª edición. Los pilotos que cuentan con más victorias en este trazado
son Michael Schumacher con tres (2000,2001, 2004) y Fernando Alonso con tres
(2005,2007, 2012). Además, el piloto español cumple en esta cita 200 carreras
en la Fórmula 1.
Por otro lado, por equipos es Ferrari la que tiene más
victorias (6) seguido de Red Bull y Renault (2).
Curiosidades:
De los actuales cinco campeones del
mundo en parrilla, sólo Lewis Hamilton no sabe lo que es ganar en Kuala Lumpur.
El que sale desde la Pole Position gana la mitad de las veces en Malasia (7 de
14). Y Kimi Raikkonen suma 29 Grandes Premios sin abandonar, solo es superado
por Nick Heidfeld como piloto de la historia de este deporte que ha terminado
más carreras (33).
Datos técnicos:
Circuito: Sepang
Ubicación: Malasia
Longitud: 5,543 kilómetros
Nº de vueltas/distancia: 56 / 310,408 KM
Carga aerodinámica: Alta
Desgaste de los neumáticos: Alto
Récord vuelta rápida: 1:36: 219 Raikkonen (Lotus 2012)
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