La gran
sorpresa de la convocatoria para el partido de esta noche en la ida de la
Supercopa fue la no inclusión del jugador brasileño. Mourinho incluyó por
delante de este a Morata y Nacho para el
enfrentamiento frente al Barcelona.
El
mensaje es claro, Kaká es completamente prescindible para Mou a falta de la
llegada de Modric , ni para cubrir ese espacio hasta que se haga oficial el
fichaje le necesita. Aunque esta situación no preocupa demasiado al jugador,
visto su comportamiento en pretemporada, en la que ha pasado desapercibido, sin
ilusión y con una pasividad preocupante ante las informaciones que se vertían
sobre su posible salida.
Ya dio
claros síntomas de dejadez en su llegada al equipo en pretemporada, muchos opinareis
que llegó cuando estaba citado por el club, pero considero que si como él ha
dicho alguna vez “mi sitio está en el Real Madrid”, debería haber adelantado
sus vacaciones, que no hay que olvidar duraron cuarenta días, para ponerse a
punto y demostrar mas compromiso. Ese compromiso deportivo que un jugador de su
talla y de su salario debería tener con el club que le paga, sin embargo,
precisamente el salario ha pasado a ser su primera y única prioridad. Ofertas
han llegado sin duda alguna al jugador y todas ellas rechazadas por el mismo
motivo, no cobraría lo mismo que el banquillo del Bernabéu. Muchos, entre los
que me incluyo pensábamos que Kaká no era igual que el resto de brasileños como
Ronaldinho o Adriano, por ejemplo, pero la situación se torna similar. Un escenario
que como he dicho ya, para un jugador de su talla debería incomodarle y tras
años alejados del primer escaparate público debería tirar de orgullo propio y
no esta apatía que le acompaña.
Mourinho
ya le ha dicho a las claras que no cuenta con él, ya no sólo por la
convocatoria de hoy, sino también por el fichaje de Modric, que en condiciones
normales de buen rendimiento del brasileño, el Real Madrid no se hubiera
planteado jamás .El último aviso ha sido lanzado, así que en un semana y media
más le vale al jugador buscarse su propio destino, una vez retirado de la puja
el PSG, la única salida que le queda es Milán o retirarse del fútbol de élite
al estilo Beckham. Aunque no descartemos que se convierte en titular
indiscutible del banquillo o la grada.
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