El piloto alemán consigue su tercera victoria consecutiva en
el campeonato y arrebata de esta forma el liderato a Fernando Alonso a falta de
cuatro carreras. La diferencia es ahora de seis puntos a favor de Sebastian.
El Gran Premio de Corea 2012 comenzó con una salida
apasionante en la que tanto Vettel como Fernando, a pesar de salir por la parte
sucia, consiguieron adelantar una posición
y colocarse primero y tercero respectivamente. Una situación que no
variaría ya en toda la carrera. Entre medias un Webber constante en su ritmo y
que ejerció su papel secundario a la perfección.
Justo detrás de estos pilotos, Hamilton se colocaba cuarto,
Massa quinto y Raikkonen sexto. Mientras que Button veía como se acababa la
carrera para él tras ser arrollado por Kobayashi en estos primeros instantes.
Una vez superadas las primeras vueltas, Sebastian Vettel
ponía la directa, marcando tiempos imposibles para sus perseguidores. Además
Webber, aunque no tan rápido como el alemán, no dejaba acercarse lo más mínimo
a Fernando. El goteo de tiempo era constante e incluso en ciertos periodos era
Hamilton el que rodaba más veloz que el asturiano.
Llegaban en esos momentos, en torno a la vuelta catorce, las
primeras paradas. El primero en entrar a boxes fue Hamilton para poner los
neumáticos duros, mientras que Alonso y Vettel lo hacían en la dieciséis, para
poner blandos. El de Ferrari apuraba quizás demasiado su pit-stop, al salir
justo delante de Sergio Pérez en una maniobra complicada y Hamilton lograba
buenos tiempos, ajustando aún más la clasificación.
En la
vuelta diecisiete Pedro Martínez de la Rosa
tuvo que abandonar por seguridad, ya que su neumático derecho se
destrozaba a pasos agigantados.
A
partir de aquí, Alonso y Webber entraban en un tira y afloja de tiempos,
propiciado por un problema de graining del australiano, pero la diferencia
nunca bajaría de los dos segundos. El de Red Bull anticipó la parada para
frenar la sangría de tiempos y la única opción para Fernando pasaba por esperar
un desfallecimiento de los neumáticos a final de carrera, algo que nunca
ocurriría. Mientras tanto Lewis Hamilton acumulaba serios problemas en su
monoplaza, perdiendo posición con Massa y Raikonnen en pista.
Ya nada
cambiaría hasta el final, todos los pilotos cuidaban los neumáticos y los
Ferrari eran incapaces de acercarse lo más mínimo a Red Bull. Un paseo militar
de Vettel, que nunca vio peligrar la primera posición obtenida en la primera
curva y se coloca primero del Mundial con seis puntos de ventaja sobre Alonso.
Por otro lado, Hamilton se descuelga definitivamente del campeonato, con un
décimo puesto que pone también la segunda posición de la clasificación de
constructores en bandeja a los de Maranello.
En
quince días, la siguiente parada, India. Mucho tendrán que trabajar los de rojo
para alcanzar el rendimiento de Red Bull, la temporada 2012 se escapa y Vettel
no afloja.
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