En la primera manga fue el
tenista nacional el que comenzó imponiendo su juego. No obstante, pronto
apareció el argentino que no acusó en absoluto el cansancio de los partidos jugados en cuartos contra Murray o de 'semis' contra Djokovic. Del Potro apuntaba
al set para él, que acabó llevándoselo con un nivel de juego espectacular. Parecía que el manacorí no se encontraba cómodo con su juego en la pista. Además, del Potro desarrolló un nivel tenístico muy
agresivo, con lo que acabo adjudicándose la primera manga con un contundente 6-4.
Sin embargo, el segundo fue
completamente diferente. Del Potro continuó confiado en sí mismo y en su juego,
pero Nadal iba recuperando esa confianza que perdió en el primer set, y poco a
poco fue realizando un juego más agresivo. Según iba aumentando la confianza de
Nadal, iba mermando la del argentino que cometía error tras error y hasta él
mismo se lamentaba de ello. Espectáculo fue lo que se pudo vivir en esta
final, con un nivel tenístico característico de una final, pero de Grand Slam. A medida
que se iba metiendo en el partido, Rafa cogía más soltura, se encontraba más
cómodo y acaba adjudicándose la segunda manga por 6-3.
Esto hacía revivir al español y
le daba opciones para poder hacerse con el torneo de Indian Wells. Por otro lado, el argentino parecía cansado a
medida que se iban sucediendo los puntos y se iba alargando el partido, pues
acumulaba cansancio de los anteriores partidos. El tercero y definitivo set
comenzó con la ventaja del español, pero donde la igualdad fue la máxima
reinante. Los últimos puntos del tercer set reflejaban a un Juan Martín del
Potro cansado no sólo del partido sino del torneo, ya que había realizado partidos
largos con un gran desgaste físico, lo que le hacía cometer muchos errores,
entre los que estaban algunas dobles faltas. Hasta tres bolas de partido dispuso Rafa para
poder hacerse con el set y con el partido, que no aprovechó y por las que luchó
el sudamericano. Increíble como del Potro remontaba, gran mentalidad de la que
dispuso cuando tenían el set en contra. Con 3-5, el argentino continuó
luchando cada bola, cada resto que le lanzaba el nacional. A pesar de esto, Nadal sí aprovechó su cuarta bola de partido y se llevó el set por 6-4, con lo que también se adjudicaba el partido y el torneo.
El arranque de la temporada del
tenista de Manacor ha sido impresionante. Ha jugado cuatro finales y ha perdido
tan solo una frente a Ceballos. Ya es número 4 en el ránking ATP y acumula 600 victorias.
No obstante y derivado de la gran cantidad de partidos jugados en su época de recuperación tras la lesión, los aficionados al tenis y
al juego de Rafa tendrán que esperar hasta el 15 de abril, pues se ha hecho
oficial que Nadal no jugará el Masters 1000 de Miami y que reaparecerá en el de
Montecarlo, sobre tierra batida, torneo que ya ha ganado en otras ediciones.
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